La mañana de este lunes, el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad de Madrid han firmado un protocolo de actuación para la ejecución de la reforma de la depuradora Sur, la infraestructura que da servicio, entre otros barrios, a Ensanche de Vallecas y El Cañaveral.

El delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y el consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, han firmado el protocolo de actuación con el objetivo de ejecutar y financiar las obras hidráulicas necesarias en las depuradora Sur, Butarque y La China. Acuerdan así, junto con el Canal Isabel II, asegurar una prestación adecuada en los servicios de saneamiento, que comprenden alcantarillado y depuración.

Según el documento, las obras, de gran complejidad, implicarán ampliar la superficie ocupada por las instalaciones en algunos casos, y deberán ejecutarse manteniendo su funcionamiento en todo momento. Esta circunstancia obliga a planificar trabajos a largo plazo y a desarrollarlos durante varios años debido a las dificultades técnicas, ambientales y administrativas. 

Según han señalado desde nota de prensa, el acuerdo entre las administraciones supone un paso decisivo para ejecutar unas actuaciones pendientes desde 2009, cuando el Gobierno central declaró de “interés general” las depuradoras de Sur, La China y Butarque, a través de la Ley 26/2009, de 23 de diciembre, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2010. 

Según ha explicado Carabante, la Administración General del Estado no ha cumplido con sus obligaciones respecto a estas infraestructuras, y únicamente se han realizado actuaciones preliminares como el estudio de soluciones, el proyecto informativo, el estudio de impacto ambiental y procedimiento de información pública y la redacción de anteproyectos de las actuaciones en materia de saneamiento y depuración de estas tres instalaciones. 

Además, según han señalado, la no ejecución de estas obras desde los casi 15 años transcurridos desde su valoración, ha supuesto que el coste estimado actual pase de los 400 millones de euros a 1.200 millones.