El Administrador estatal de infraestructuras ferroviarias (ADIF) formalizó el 23 de enero de 2024 el contrato de la primera fase de obras de remodelación de la subfase 1C de la terminal intermodal ferroviaria de mercancías Madrid-Vicálvaro.
El contrato fue adjudicado a la UTE Terminal Vicálvaro 2, integrada por Dragados SA y Tecsa Empresa Constructora, por 32.395.190,75 euros, que han sido financiados con fondos europeos Next Generation EU. Está previsto que los trabajos se extiendan durante 14 meses. Se trata de la tercera intervención contemplada en el ámbito, fronterizo con los terrenos de la Nueva Centralidad del Este y el municipio de Coslada.
La actuación prevé ejecutar un haz intermodal de cuatro vías pasantes con las cabeceras tanto al norte como al sur. En esa zona, se incluye una losa de hormigón destinada a la regulación y almacenamiento de Unidades de Transporte Intermodal (UTI) o contenedores, gestionada mediante tres grúas pórtico automatizadas (A-RMG) que realizarán las labores de la manipulación de UTI en la carga y descarga entre trenes y camiones.
Este nuevo módulo intermodal podrá tratar trenes de 740 metros de largo. Tendrá una capacidad de manipulación de 150.000 contenedores anuales (casi un 3 por ciento de todos los contenedores que llegan al país) y de almacenamiento bajo pórtico de 2.500 TEU (unidad de carga de un contenedor normalizado de 20 pies).
Nuevos accesos
El contrato incluye la urbanización y los viales de la nueva zona intermodal, estableciéndose un circuito para el acceso, carga y descarga de los camiones, controles de acceso y aparcamiento para vehículos pesados y ligeros. El acceso de vehículos a la terminal en una primera etapa provisional (hasta la construcción del enlace con la M-45, actualmente en fase de proyecto) se realizará desde la carretera M-214, en la que se ejecutará una glorieta distribuidora de tráfico a tal efecto.
En total, el Adif va a invertir 300 millones en la remodelación de esta terminal intermodal. Actualmente, está ejecutando los trabajos de la fase 1B, que consiste en adaptar las pendientes de la terminal a la carga máxima a la longitud de los nuevos trenes de mercancías de 740 metros. También se reconfigurarán las vías generales del entorno para mejorar el acceso viario directo a la terminal.
Esta primera etapa planea también el edificio técnico de gestión y la fase 1.D, que contempla la construcción de seis nuevas vías así como la prolongación de otras ocho en la instalación técnica sur. La fase 1.A ya está concluida. Consistió en la creación de cuatro nuevas vías para la recepción y expedición de los trenes y un nuevo enclavamiento electrónico en el haz técnico sur de la infraestructura.
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