El desarrollo urbanístico de Valdecarros contará en sus etapas 6 y 8 de urbanización con una gran área central de planta hipodrómica de 200.000 metros cuadrados de superficie que estará rodeada de torres con capacidad para acoger casi 3.000 viviendas y más de medio millón de metros cuadrados de espacio terciario.
La base conceptual de este hito urbano se describía en la memoria general de Valdecarros, fechada en enero de 2007 y realizada para la Junta de Compensación por el despacho arquitectónico de Valentín Merino. Planteaba la creación de una centralidad que se correspondía con una dotación pública sobre una plataforma de 200.000 metros cuadrados de superficie, subdividida en cuatro parcelas (B.23.a, B.24, C.29 y C.30.a, con 145.580 metros cuadrados de superficie, más los viarios) y 200 metros de ancho, el doble que la Gran Vía de Madrid, que se desarrollaba entre etapas (la sexta y la octava) y a ambos lados de la M-31. Una especie de ‘Eixo Monumental’ como el de Brasilia, en miniatura.
Cogollo urbano
Se tratará del extremo suroeste de la Gran Vía del Sureste, donde desembocará la red de Bus de tránsito rápido (BRT) transversal que unirá todos los desarrollos del sureste, y el enlace de BRT con la estación de Cercanías del Pozo. También, un carril bici en viario que circunvalará todo este cogollo urbano.
Según el diseño parcelario del sector, el perímetro de esta gran extensión de terreno de planta hipodrómica estará conformado por dieciséis parcelas de edificios de gran altura y zonas verdes. A saber, por un lado, seis torres de 15 plantas de residencial colectivo con usos de vivienda libre y zócalo comercial (B.12.a, B.13.a, B.26.a, B.27.a, c.25.a y C.35.a). Serán 81.845 metros cuadrados de superficie, 278.553 metros cuadrados de edificabilidad residencial y 14.400 de edificabilidad terciaria. Estos edificios, pensados para que tengan una crujía media-ancha sin patios, tendrán capacidad para acoger alrededor de 2.983 viviendas.
Rascacielos en Valdecarros
Por otro lado, seis parcelas de uso de servicio terciario (B.11.a, B.25.a, C.26.a, C.27.a, C.36.a y C.37.a) que ofrecerán 51.435 metros cuadrados de superficie en edificios de 14 plantas, 348.592 metros cuadrados de aprovechamiento para terciario de oficinas y otros 12.000 metros cuadrados para otros usos terciarios en sus tres primeras plantas.
Serán el acompañamiento de los dos grandes rascacielos de 44 plantas que serán el remate suroeste del complejo (parcelas C.24 y C.34). Dos edificios sobre sendas parcelas de 27.597 metros cuadrados de superficie, con 105.378 metros cuadrados de edificabilidad para oficinas y 22.540 metros cuadrados de terciario lucrativo de otra naturaleza cada una.
Dos zonas verdes terminarán de rubricar la zona. Una, el parque diagonal procedente de los límites con la M-45 (uno de los ‘pasillos visuales’ que se proyectaron al inicio del proyecto) que desembocaría en los rascacielos a través de la parcela C.25.b., de 2.353 metros cuadrados. Por otra parte, la gran zona verde (C.28, 14.093 metros cuadrados de superficie) que servirá de entrada a los dos colosos de oficinas.
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