El intercambiador de Metro de Los Ahijones – Los Berrocales será una estación pasante de hasta cuatro carriles para garantizar el servicio hasta Arganda del Rey sin transbordos, según informaron a Nuevo Sureste fuentes de la Consejería de Transportes.
Las citadas fuentes explicaron que dicha transformación de la línea 9 de Metro permitirá que la red en 2030, cuando expire la concesión del tramo entre la estación de Puerta de Arganda y Arganda del Rey, esté preparada para que los trenes puedan ir desde Paco de Lucía a Arganda, y viceversa, sin ningún transbordo, con la tipología de necesidades de alta demanda (es decir, en hora punta).
En ese sentido, el organismo que dirige Jorge Rodrigo puntualiza que esta fórmula no supondrá que todos los trenes hagan esta ruta hasta Arganda del Rey, sino que algunos terminarán en la nueva estación de Los Ahijones – Los Berrocales. De este modo, concreta la Consejería, se dará la oportunidad a los desarrollos del sureste de disfrutar de las demandas de Madrid capital.
La Comunidad de Madrid responde así al recurso del Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid por las cláusulas del nuevo contrato de redacción de la estación que licitó el ente regional, que indican que la nueva estación «deberá poder modificar el sistema de explotación permitiendo la ruptura del servicio que actualmente se realiza en la estación de Puerta de Arganda».
Problemas de espacio
El Consistorio ripense denuncia un deterioro muy significativo del servicio para sus vecinos porque entiende que esa frase supone establecer un nuevo transbordo para que los ripenses conecten con el Cercanías, ubicado en la estación de Puerta de Arganda. A juicio de la Consejería de Transportes, el nuevo modelo no penalizará a Rivas, ni a Arganda.
Para hacer eso posible, el nuevo intercambiador de Metro de Los Ahijones – Los Berrocales deberá tener un número de vías que permita ser estación pasante. Las previsiones de Transportes plantean la construcción de una o dos vías adicionales a las dos que ya existen en el trazado.
El problema al que tendrán que dar solución técnica los proyectistas es la gestión del espacio. El aumento del número de vías implica necesariamente ensanchar la plataforma por la que van los caminos ferroviarios, ya de por sí encastrados en muchos puntos del recorrido.
Eso implica soluciones técnicas que no se han desvelado que podrían suponer absorber los taludes o las zonas verdes perimetrales de los barrios en construcción a la altura de la estación. Hay que tener en cuenta que el tren ya pasa a ras de la ermita de la Virgen de la Torre y que, junto a las vías hay limitaciones de espacio por los planes de las juntas de compensación para la recuperación de las veredas de Estevillas, la Oreja, El Espinillo y Los Prados, y la recuperación de los cauces del arroyo de Los Ahijones y el Henar.
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