El Cañaveral es el desarrollo que se ha erigido como la vanguardia de la transformación urbanística del sureste de la capital. Se trata del primer barrio que ha echado a rodar en la zona. Además de la urbanización, hasta ahora, allí se han puesto en marcha tres grandes promociones que incluyen numerosos edificios residenciales, la mayor parte con licencia municipal de construcción. Es decir, es un espacio en marcha en el que ya viven 12.000 personas y que sigue en plena expansión.

El ámbito, aprobado por convenio urbanístico en noviembre de 1996, cuenta con 5.388.384 metros cuadrados de superficie. El proyecto de urbanización fue aprobado el 23 de febrero de 2006 y su reparcelación, el 18 de febrero de 2010. A partir de junio de 2012, se simultanearon las obras de edificación con las de urbanización.

El sector se ha articulado mediante la construcción de un ámbito segmentado en tres zonas. La primera y mayor (1.421.000 metros cuadrados de superficie edificable -827.000 metros cuadrados de suelo-) es un espacio residencial ordenado de forma ortogonal con capacidad para 14.000 viviendas (unos 52.000 habitantes), la mitad de ellas con algún tipo de protección. Este fragmento del barrio cuenta con espacio reservado para equipamientos (825.661 metros cuadrados) y usos terciarios. Todo él gira alrededor de una gran plaza que sirve de nodo de comunicaciones mediante un viario distribuido en dos niveles que conecta las cuatro calles que confluyen en él. 

A su alrededor, se arremolina un gran parque central que nutre  de naturaleza a la zona residencial. Se trata de un espacio público natural que potenciará la biodiversidad en plena zona urbana, recreando el contacto con la naturaleza. El Cañaveral también contará con un parque lineal conformado por una hilera de pequeños parques de gran variedad vegetal. Al norte, se creará otro parque de vegetación espontánea que incluirá caminos peatonales y carriles bici. Por último, el ámbito contará con jardinería de viario y en glorietas para hacer más amable el espacio urbano. En total, el barrio contará con 1.263.435 metros cuadrados de espacios verdes.

Los primeros equipamientos públicos

El Ayuntamiento de Madrid ya ha incluido en sus presupuestos generales para 2024 numerosas inversiones como la semaforización de la zona, la construcción de los primeros parques, una escuela infantil y un campo de fútbol. Asimismo, comenzarán los trámites para la construcción de una biblioteca, un centro cultural, un auditorio y una ludoteca, para la que ya están previstas inversiones en los siguientes ejercicios.

La segunda parte del proyecto es la industrial, localizada al oeste y separada de la residencial por la M-45. Allí se concentran todos los usos secundarios (370.291 metros cuadrados de suelo y 414.600 metros cuadrados de superficie edificable) para minimizar la perturbación del resto de usos del sector y facilitar los accesos a cada parte del sector desde las vías rápidas anexas al barrio. Por último, la tercera parte, ubicada al norte para facilitar los accesos y reducir el impacto del tráfico rodado, está integrada por una gran superficie comercial para la que se han reservado más de 90.000 metros cuadrados edificables que incorporan usos de comercio y ocio (en total, todo el barrio concentra 303.698 metros cuadrados de uso terciario lucrativo de todo tipo).

El Cañaveral  se conecta al sur con el desarrollo de Los Ahijones, al este con el de Los Cerros y al oeste con el área de La Marsala y el desarrollo de la Nueva Centralidad del Este. Se han habilitado en el barrio varios ámbitos de conexión con sus barrios vecinos para facilitar las comunicaciones. De norte a sur, está atravesado por la M-45, que parte el ámbito en dos (la mayor parte, en el este, es la residencial; al noroeste, al otro lado de esta vía rápida, está espacio industrial y comercial).

También consta de un acceso a la R-3 por el sur, al límite con El Cañaveral y Los Ahijones. El parque industrial tendrá conexión con el polígono industrial de Vicálvaro y, por el norte, con Coslada. El ámbito estará conectado por transporte público a través de las líneas de autobús y Bus de uso Prioritario que engarzarán los ámbitos del sureste y está en estudio la posibilidad de ampliación de la línea 2 de Metro de Madrid hasta un área intermodal de transportes que estaría en la zona central del barrio.